¿Te pica la curiosidad sobre cómo hacer masajes con piedras calientes de forma idónea? En nuestro curso de masaje en balnearios, spas y centros de relax podrás formarte de forma teórica y práctica para convertirte en masajista profesional, una figura muy buscada en la actualidad. Si siempre te han gustado los masajes, no dejes pasar esta oportunidad. A continuación te damos más detalles sobre cómo se hace un masaje con piedras calientes, sus beneficios y qué consejos deberías tener en cuenta.
¿Cómo se realiza el masaje?
Las protagonistas del masaje son las piedras calientes, que tienen unas propiedades capaces de eliminar la energía negativa de nuestro cuerpo para purificarlo. De hecho, se trata de un tipo de terapia inspirada en los 7 centros de energía (chakras), igual que el reiki. Las piedras están perfectamente pulidas, normalmente con formas redondeadas y planas, y son de origen volcánico, de mármol blanco o de cuarzo. Todas ellas tienen temperaturas diferentes, que van de los 50ºC hasta los 8ºC. Al principio del masaje se aplica un aceite esencial que facilita el desliz de las piedras por el cuerpo. Seguidamente, se colocan las piedras calientes en puntos determinados del cuerpo (cabeza, espalda, muslos, manos y pies) y se masajeará, notando como poco a poco aumenta la temperatura del cuerpo e incluso se empieza a sudar. Para realizar el contraste, recuperar la temperatura corporal y tonificar los músculos se terminan aplicando las piedras frías.
Beneficios de este masaje
Al finalizar el masaje con piedras calientes se notarán beneficios como:
- Relajación.
- Mejora en molestias de la espalda.
- Alivio de dolores musculares y óseos.
- Dolores menstruales más calmados.
Pero no solo sirve para una mejoría justo tras el masaje. También provoca efectos positivos que se repararán a más largo plazo como:
- Eliminación de toxinas.
- Mejora en la circulación de la sangre.
- Niveles de energía renovados.
- Equilibro del sistema nervioso.
- Oxigenación e iluminación de la piel.
- Combate del insomnio y la ansiedad.
- Corrección el flujo de energía de nuestro cuerpo.
Recomendaciones para un masaje
El primero de los consejos a tener en cuenta a la hora de realizar un masaje con piedras calientes es que debe ser practicado por un especialista cualificado. De lo contrario, el masajista no conocerá cuáles son las posiciones adecuadas de las piedras, su temperatura, su adaptación ni los puntos de energía que se deben tratar. Eso no solo puede generar que el masaje no tenga efecto, sino que además provoque quemaduras en la piel si las temperaturas no son correctas o complique los malestares ya existentes con manipulaciones erróneas. También es imprescindible que las piedras estén esterilizadas antes de ser aplicadas al cuerpo, ya que entran en contacto con el sudor. Además, existen casos en los que se debería evitar ese tipo de masajes, como en mujeres embarazadas, niños, personas con heridas abiertas, con la presión alta, con venas varicosas, enfermedades cardiacas, anorexia o diabetes.