El herpes también se puede tratar con aceites esenciales.
El virus del herpes simple es una infección vírica muy común en nuestra población. Este virus se contagia por contacto muy fácilmente. Tanto la clase de virus herpes tipo 1, como la clase de virus herpes tipo II; pueden manifestarse al rededor de la boca y la nariz en forma de llagas que escuecen o duelen, así como en los genitales e incluso alrededor del ano.
Este virus no tiene cura, una vez entra en el cuerpo se instaura en nuestras células nerviosas y permanecerá en ellas de por vida. Sin embargo portar un virus no significa necesariamente desarrollarlo. El virus puede permanecer en nuestro cuerpo sin manifestarse en forma de llagas o vesículas.
Es el único virus del mundo sobre el que se desarrolla un antivírico eficaz, el Acyclovir. Este tarda siete días en hacer su trabajo.
Existe un antivírico natural de potencia extrema, el aceite esencial de romero alcanfor, siete veces más rápido que el antibiótico químico desarrollado. Una aplicación pura de este aceite sobre la llaga de una sola gota cada dos horas frena la infección bacteriana y la seca en un solo día en resultados óptimos. Al día siguiente la vesícula estará seca, restando solo la herida que debemos dejar cicatrizar.
No sólo es efectiva cuando el virus ya se ha desarrollado. Las personas que conviven constantemente con el virus notan cuando saldrá el herpes antes de que este sea claro, porque se enrojece mucho la zona y pica. Cuando es así, si se lleva a cabo el mismo tratamiento, en la mayoría de los casos el virus ni siquiera brota. ¡¡Los resultados son espectaculares!!
Buenos días, sufro herpes labial desde que era adolescente. Normalmente coincide con la época pre-menstrual o con bajadas de defensas por resfriados.
Normalmente veo que se indica el Aceite de Árbol de té y Lavanda para tratarlo. En las propiedades del Aceite de Romero alcanforado tampoco me consta que sirva para tratar herpes.
Agradecería ampliar la información ya que estoy muy interesada en encontrar un remedio efectivo natural.
Saludos cordiales,
María